La fase de mantenimiento y operación y mantenimiento de una propiedad representa un lapso de tiempo muy largo con altos costos de operación, incluso más altos que los que se enfrentan durante la fase de diseño y construcción.
Los problemas que se plantean durante esta fase son de distinta naturaleza, desde la necesidad de reducir los costos de mantenimiento hasta la necesidad de disponer de información real y actualizada sobre el inmueble «tal como está construido». Los edificios se renuevan y se vuelven a poner en funcionamiento, por lo que el hecho de tener sistemas de almacenamiento actualizados sobre el estado real de la propiedad produce una ganancia neta desde muchos puntos de vista.
Por consiguiente, abordar la cuestión de la relación entre el BIM y la gestión de instalaciones es más actual que nunca, el BIM debería representar de hecho el punto de llegada en el que toda la información del Modelo de Información del Proyecto (PIM) converja para convertirse en el Modelo de Información del Activo (AIM), activos de información del activo construido.
El uso de modelos basados en BIM simplifica las actividades de gestión del activo inmobiliario, facilitando las operaciones rutinarias: desde la encuesta, pasando por la búsqueda de información sobre las entidades presentes, hasta un conocimiento siempre actualizado y detallado del estado actual del inmueble. Las entidades paramétricas, los procedimientos estándar y los datos estructurados, ofrecen un apoyo eficaz a los procesos de adopción de decisiones y a las opciones operacionales, transformando el Digital Twin en un depósito computadorizado, dinámico e inteligente de la obra Tal cual: el AIM.
Se obtiene una ganancia neta en términos de
- Gestión del espacio
- Vea
- Gestión de la energía y la sostenibilidad
- Gestión de emergencias/seguridad
- Visualización de datos en tiempo real
- Y muchas más actividades.
Se requiere un cambio radical del proceso de construcción, pero aún más de los operadores del sector: un fuerte impulso hacia el diseño integrado. «Comenzar con el fin en mente», diseñando con el objetivo final en mente. Para asegurar la interoperabilidad y la eficiencia es necesario programar desde el principio todos los datos e información útiles para la gestión del activo. Es necesario elaborar directrices operacionales basadas en la utilización de formatos estándar y procesos de trabajo bien definidos, guiados por operadores capacitados sobre el terreno.
Para integrar el modelo BIM con el software de FM, es esencial desarrollar flujos de trabajo que hagan posible la integración entre las entidades parametrizadas y los programas de gestión. Es esencial:
- Crear un código único para todas las entidades que se mantendrán.
- Establecer la clase de ifc que responde
- Verificar qué conjunto de parámetros y qué propiedades se valorarán para las entidades modeladas
- Definir qué información necesitan los sistemas de FM
- Crear sistemas de información para la interoperabilidad de esta información entre un sistema y otro.
La adopción de sistemas complejos representa una reestructuración, en primer lugar, de la forma de pensar y, a continuación, de los procedimientos e instrumentos de trabajo de todos los actores implicados. A pesar del gran esfuerzo adicional en la organización de los contenidos y el método de trabajo, la gestión de las instalaciones se beneficiará de indudables ventajas que garantizarán al cliente un modelo virtual siempre actualizado cuando cambien todas las condiciones ambientales.